Jorge Melguizo es Consultor en gestión pública, cultura, convivencia y urbanismo social, fue secretario de Cultura de Medellín en el 2010 y en los años 90 destacó por su ejecución de proyectos culturales y artísticos dentro de la ciudad de Medellín.

Jorge Melguizo realizó Talleres de gestión cultural, paz y ciudadanía en el Parque Cumandá entre el 15, 16 y 17 de abril; donde destaca el crecimiento de Medellín, Colombia, como una ciudad que enfrentó a la violencia mediante la cultura y la pedagogía.

Por Belén Jimbo:

El día 16 de abril de 2024, se reunió con los dirigentes de la Red Ecuatoriana de Cultura Viva Comunitaria (REDECVC) en el Centro Histórico de Quito donde compartieron ideas y experiencias de la cultura comunitaria aplicada en comunidades y barrios. Jorge explicó, desde su testimonio, como llevó a cabo este proceso:

“Intentemos modificar la dinámica de la Red, llamábamos red a lo que no era, decíamos las mismas cosas, hablamos los mismos, nos reunimos los mismos ¿Dónde estaban lo demás? El año pasado había 65 personas y solo participábamos cinco. Yo decía: Y las otras voces ¿Dónde están?

Debido a esto, la red de Medellín se dejó de reunir y todo era digital; desde hace un año, hay reuniones quincenales y tiene nuevos liderazgos, pero hay un grupo de jóvenes que no habían aparecido porque no asumieron que pertenecían ahí: ahora tomaron el liderazgo de esta comunidad. Hoy en día, somos actores secundarios Jorge Blandón (director de la Corporación Cultural “Nuestra Gente”) y yo. Este tipo de acciones fortaleció a la Red.

Hoy, como todo proceso, somos 92 en un grupo; de las cuales, hay 32 organizaciones; es decir que, si cada persona se sienta en esa mesa le preguntamos sobre sus trabajos en colectivos nos dice: ‘yo tengo a un número de personas de este colectivo, de un barrio y de una organización’. Eso ya es parte de la representatividad.

En referencia a las políticas públicas, fue más fácil la política que el decreto reglamentado, fue un logro desde las organizaciones de CVC que se dio en el 2011 por uno de los concejales de Medellín que es cercano a las organizaciones. Él lo llevo al concejo y se aprobó por unanimidad y se demoró tres años la reglamentación para operar.

Dentro de ese reglamento, pusimos las exigencias para acceder a los recursos; una de ellas es que, cualquier organización, que no esté en la red, puede participar a la convocatoria que lanzamos.

Cuando publicamos la convocatoria tuvimos que hacer un encuentro, en un momento dijimos: ‘se van a presentar las mismas organizaciones y van a ganar las mismas’, esto va a ser un desestimulo para CVC. Los colectivos conocidos no se presentaron, en una acción voluntaria, para que otros postulen y eso garantizó credibilidad en el proceso.

En Medellín se creó las redes de bibliotecas y cuando mencionamos el diseño fue como pensar en el sistema solar, específicamente, en el sol; esto significa que, debe tener características positivas y negativas ¿Cuál es la característica positiva del sol? Da vida, da calor, alumbra, lo negativo es que es sofocante. Por lo tanto, el sol es la biblioteca y los planetas son las casas culturales, las secretarias, los satélites son los proyectos culturales. Entonces, tenemos que poner el parque biblioteca que tenga las dos características; la primera, que de vida a los planetas y la dos, que no se cumpla lo negativo.

La red debería ser proveedora de contenidos. Hay que producir conocimiento, cada encuentro debe producir un libro de avance que tuvieran una línea de estas discusiones y ver el avance que tienen estas intervenciones anuales. Creo que nos falta ese tipo de cosas”.